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Lectura: Hebreos 13:8-16

Versículo destacado“Jesucristo es el mismo ayer, y hoy, y por los siglos” Hebreos 13:8

Tema:  Jesucristo sigue vivo y en misión en el mundo.

Comentario: ¡Qué bueno es levantarse y saber que nuestro Señor y Salvador vive! ¡Qué bueno saber que este buen amigo siempre está con nosotros! ¡En cualquier circunstancia, en cualquier situación! Los cristianos no podemos peregrinar a la tumba del líder y fundador de nuestra religión, porque simplemente no hay sepultura que contenga sus restos mortales. Los demás fundadores y maestros de las grandes religiones y pequeñas sectas, han vivido, han pasado y han muerto. Tal vez, hayan dejado algún legado, pero hoy no pueden acompañar a sus seguidores. Sus restos se han vuelto al polvo. Por el contrario, ¡Jesucristo no pudo ser contenido ni por la mismísima muerte! El mismo Jesús de Nazareth que caminó por los polvorientos parajes de Palestina hace dos mil años, sigue vivo hoy y trabajando hoy en la misma misión de antaño. ¿Cuál fue esa misión?  El apóstol Pedro la explica diciendo que el Señor Jesúsanduvo haciendo bienes y sanando a todos los oprimidos por el diablo, porque Dios estaba con él” (Hechos 10:38). No estamos solos. Jesús camina con nosotros, a nuestro lado también hoy. Él sigue en misión, acompañándonos y haciendo bien a nosotros y a todos los que se acercan a recibir de él. Hebreos 13:8 dice: “Jesucristo es el mismo ayer, y hoy, y por los siglos”. Encaremos este día con confianza, sabiendo quién está a nuestro lado. Recordemos que es el mismo que sanó a los enfermos, el mismo que liberó a los atormentados, el mismo que calmó las tempestades y venció las garras de la muerte, el mismo que apaciguo al estridente mar y reparó en los olvidados. El mismo que alimentó a los hambrientos y acarició a los leprosos, el mismo que resucitó a los muertos y le devolvió la vida a los que ya no tenían esperanza. ¡Ese Jesús es el mismo que hoy no ha cambiado y está con nosotros! Ese mismo Jesús es el que está en nuestra barca y nos acompaña en el viaje. Por eso, vivamos este día con confianza y con fe por quien nos acompaña. Recordemos – hoy y siempre – que es precisamente por nuestro Señor Jesús que llegaremos a buen puerto, porque estamos en la mejor compañía.

¡Qué la gracia y la paz de Dios sean sobre sus vidas!

En Cristo,  Julio Fernández